RAMONA Y FANDANGA

 

     De estas "bestias", en el aspecto musical, mucho se puede decir que no se haya dicho aún pues nunca nadie había dicho nada hasta ahora. No seré yo quien se atreva a romper esa juiciosa decisión y desatar algún maleficio irreparable. Surgidas como prototipo fallido, allá en el año 1983, de la Lauren Postigo Factory, excepcional desliz en uno de los mayores "factotums" de nuestro panorama musical que, casi siempre, ha tenido el olfato preciso, el gusto adecuado y el tacto justo para dar con la fórmula mágica de la aquiescencia popular. Recuerden si no, entre otros, a monstruos de la talla de un Fernando Esteso, artista donde los haya, mejor persona y paisano, a la sazón. Ay amigos!, pero la España surgida tras el magno evento del Campeonato Mundial de Fútbol España '82, ya no era la misma. La venida del Papa Juan Pablo II a pontificar esta tierra, la llegada del socialismo a traer justicia y progreso, la imparable modernización en todos los órdenes y la decidida mirada hacia la Europa de la convergencia no debían ser el abono propicio para la germinación de Ramona & Fandanga. Pero, no me negarán que, si su articulación escapular se lo permite, inclinando a la derecha sus cuellos, echan una ojeada al repertorio, esos temas no parecen aparentes y que, a lo mejor, algo sí tenían que decir y, en todo caso, ese BOTIJO epicéntrico resume todo lo dicho.

 

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