LOS TORETES
Directamente del stand de una gasolinera-tienda de conveniencia venida a menos a pie de carretera de la
red terciaria autonómica del Estado -ocultaré más detalles por temor a sobreexplotar sus recursos-, les
traigo esta prueba viva de la condición humana congénere.
El objeto sonoro, como imaginarán ustedes, viene manufacturado en formato cinta ferrocromo a todo lujo,
con caja plástica y sónido estéreo. Le falta lo del dolby, pero tampoco nos vamos a poner rígidos por eso.
Artistas, diseño y repertorio nos prometen emociones en cadena. Veamos con un poco más de detalle:
Del año 1988, cuando la fiebre de la rumba más canalla y delincuente, quintaesencia de
Vaquillas y parientes, había conocidos mejores días, estos gemelos
filocalés de aspecto ratonero, "explotación" de artistas de mayor fuste y mezcla imposible entre los
Golfos, el Dúo Dinámico, un Joselito desdoblado, unos Chunguitos bonsais y un aire
primitivo, como de Pedritos Ruíz agitanados, nos confirman esa tendencia
a la cosecha fértil con el que, no me canso de recordar, el rastreo de anaqueles de gasolineras nos
compensa.
Les recomiendo que escuchen la pieza aquí ofrecida para su deleite:
"Caramba, Niña". Disfruten con su alegre ritmo y sus desenfadados ripios, ejemplos del salero y gracia con que
Los Toretes cantan a los encantos de las niñas.